En el Día Mundial de la Trata de Personas, descubra lo que ADRA está haciendo para proteger a los vulnerables.
30 de julio de 2025 | Silver Spring, Maryland, Estados Unidos | ADRA Internacional y Adventist Review
Cada año, el 30 de julio, que es el Día Mundial de la Trata de Personas, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) hace una pausa para recordar a los millones de vidas afectadas por la trata de personas, especialmente a los niños y adolescentes, que a menudo son los más vulnerables. La misión de ADRA se basa en “la justicia, la compasión y el amor”. Estos valores guían los esfuerzos de la agencia para proteger, apoyar y restaurar las vidas de quienes corren el riesgo de explotación, incluidos los niños migrantes que cruzan solos fronteras peligrosas.
Una de esas historias es la de Emily Valentina Lores Carrasquel, una niña venezolana de 12 años cuya vida se vio dramáticamente alterada por un momento de confianza fuera de lugar, pero que encontró seguridad y esperanza nuevamente gracias a los esfuerzos de ADRA.
La vida de Emily Valentina Lores Carrasquel, de 12 años, se vio dramáticamente alterada por un momento de confianza fuera de lugar, pero volvió a encontrar seguridad y esperanza gracias a los esfuerzos de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA). [Fotografía: ADRA Internacional]
Emily había vivido en Colombia con su familia durante seis años después de huir de la inestabilidad económica de Venezuela. Un día, un amigo la convenció de escapar a Perú, diciendo: “Si me amas, vendrás conmigo”. Y Emily fue.
Una vez en Perú, Emily se encontró aislada y sin apoyo. Su amiga y el novio de su amiga trabajaban mientras Emily quedó sola, deambulando por playas y calles. Con los días, las tensiones aumentaron y Emily se quedó completamente sola.
Sin recursos ni contactos seguros, trató de llegar a Ecuador. En la frontera conoció a venezolanos que le señalaron el espacio de atención integral de ADRA en Huaquillas.
En ADRA, Emily fue recibida con los brazos abiertos. El personal de ADRA le ofreció algo más que comida y refugio: le brindaron atención médica, apoyo emocional y, lo más importante, seguridad.
“Me recibieron bien y hoy me siento bien. Iliana y Michel me tratan bien. Me llevaron al médico cuando me sentí mal, me dieron comida y me brindaron un lugar seguro para dormir”, contó Emily.
ADRA trabajó para reunir a Emily Valentina Lores Carrasquel, de 12 años, con su madre, Sanyelis, en Colombia. Después de semanas de coordinación y comunicación, se produjo el tan esperado encuentro. [Fotografía: ADRA Internacional]
“Volver a ver a Emily después de dos o tres meses. . . Estoy muy agradecida con ADRA”, dijo Sanyelis. “Me ayudaron a llegar aquí, nunca perdieron el contacto y cuidaron muy bien a mi hija. Que Dios los bendiga”.
El trabajo de ADRA va mucho más allá de la respuesta a emergencias. Como parte de sus esfuerzos de salvaguardia, ADRA empodera a las comunidades para que reconozcan, prevengan y respondan a los riesgos de la trata, especialmente de las mujeres, los niños y los migrantes.
“En ADRA creamos conciencia en las comunidades y entre el personal para asegurarnos de que sepan cómo identificar y prevenir la trata de personas”, dijo Beryl Hartmann, directora de salvaguardia de ADRA Internacional.
“Esto es parte de nuestro enfoque integral para garantizar la seguridad de todas las personas con las que trabajamos”, dijo Hartmann. “Nuestros equipos están impulsados por la justicia, guiados por la compasión y sostenidos por el amor. Ayudan a reunir a las familias, protegen a los desplazados y ofrecen un camino a seguir cuando todo parece perdido”.
El trabajo de ADRA va mucho más allá de la respuesta a emergencias. Como parte de sus esfuerzos de salvaguardia, ADRA empodera a las comunidades para reconocer, prevenir y responder a los riesgos de trata. [Fotografía: ADRA Internacional]
“Nunca salgas de tu casa sin el permiso de tu madre. Hay muchos peligros: secuestros, violaciones y otras cosas terribles. Es mejor viajar con tu familia”.
En este Día Mundial de la Trata de Personas, todas las personas pueden ser parte de este trabajo que salva vidas, dijeron los líderes de ADRA. “Puedes orar por los niños vulnerables, apoyar las iniciativas de respuesta y protección contra la trata de personas de ADRA y compartir historias como la de Emily para crear conciencia”, dijeron. “Porque todos los niños merecen estar seguros. Toda madre merece volver a abrazar a su hijo. Y cada persona merece vivir libre”.
Traducción de Marcos Paseggi