1 de mayo de 2007 Nueva York, Estados Unidos….[Personal de ANN]

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) está despertando al papel que las organizaciones religiosas pueden desempeñar al lograr sus objetivos, en particular, en el área del desarrollo social y temas de paz.

«Es intrigante que la ONU ha, por fin, descubierto la religión», dijo Jonathan Gallagher, representante de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en la ONU. «En reuniones recientes, en forma particular, una sobre cooperación ínter confesional para la paz, los oradores han reconocido el papel que las organizaciones religiosas pueden desempeñar en mejorar nuestro mundo».

«No hay mejor tiempo que ahora para los diálogos interreligiosos y la paz», dijo el embajador de las Filipinas, Hilario G. Davide, hablando sobre el informe sobre diálogos entre religiones efectuados en la ONU el 18 de abril.

La reunión, organizada por el Comité de Organizaciones Religiosas no Gubernamentales en la ONU, no será la última que urja a los miembros de los estados que componen la ONU a que reflexionen sobre medidas hacia relaciones más pacíficas y de cooperación entre las regiones del mundo y los grupos religiosos. Davide resaltó los próximos diálogos sobre religión de alto nivel a llevarse a cabo en la ONU en el mes de mayo.

«Hace sólo cinco años, de ese tema no se habría oído nada», observó Azza Karam, Consejero Cultural para el Fundo Poblacional de Naciones Unidas, «pero ahora los diálogos ínter confesionales están aumentando en forma acelerada. Muchas agencias de la ONU están despertando para trabajar con organizaciones religiosas».

Emmanuel Kattan, de Alianza de las Civilizaciones, promovió la importancia del entendimiento intercultural y el diálogo entre credos. «Las comunidades religiosas están sosteniendo desempeños concretos en educación con los jóvenes y en los medios. Debe reconocerse la contribución de las organizaciones religiosas no gubernamentales y construir sobre ésta».

Comentando sobre cómo está cambiando el papel de las organizaciones religiosas que se percibe, el vocero de la iglesia mundial adventista, Rajmund Dabrowski, señaló un creciente interés en la contribución de las organizaciones religiosas. «Desde una perspectiva de comunicación, muchas organizaciones multinacionales están comprendiendo que las comunidades religiosas juegan un papel vital en sus comunidades, y pueden contribuir mucho al desarrollo de la sociedad», dijo él.

«Es valioso notar que la ONU también está reconociendo este papel que la iglesia puede desempeñar. Lógicamente, una influencia religiosa sin límites sobre la ONU sería contraproducente; sin embargo, la apertura recién descubierta hacia el papel desempeñado por las organizaciones religiosas debería ser ponderado», dijo Dabrowski.

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