9 de octubre, 2011, Silver Spring, Maryland, Estados Unidos…Elizabeth Lechleitner/ANN
El máximo liderazgo de la Iglesia Adventista del Séptimo Día endosó hoy un plan para evangelizar las ciudades del mundo, comenzando en 2013 con la Ciudad de Nueva York. El voto se efectuó como una respuesta práctica al llamado del presidente de la iglesia a nivel mundial ayer para que se ponga como prioridad llegar a los grandes centros urbanos, donde vive la mitad de la población del mundo en la actualidad.
Históricamente, las áreas rurales han respondido más al mensaje de esperanza de la iglesia adventista que las ciudades, dijo el secretario de la iglesia a nivel mundial, G. T. Ng. «Somos una iglesia de islas y aldeas», le dijo a más de 300 delegados en la sede de la iglesia el 9 de octubre que asisten a las reuniones de negocios del Concilio Anual.
«La evangelización urbana puede ser abrumadora», agregó Ng.
Se estima que en la Ciudad de Nueva York viven 19 millones de personas que hablan unos 800 idiomas.
Alcanzar las ciudades pesó sobremanera en la mente de aun los primeros adventistas, dijo Ng. La cofundadora de la iglesia, Elena G. White escribió que ella pasó muchas noches en vela pensando a cerca de la evangelización a las grandes ciudades. «Es doloroso pensar que han sido abandonadas por tanto tiempo», escribió ella.
Aún en el presente, «la mayor parte de los recursos de la iglesia va fuera de las ciudades, aunque la mayoría de las necesidades están ahora dentro de las ciudades», dijo Gary Krause, director de la Oficina Misión Adventista de la iglesia. Haciéndose eco de una declaración bien conocida de White, Krause dijo que la iglesia debe seguir el ejemplo evangelizador de Jesús en el Nuevo Testamento – él se mezcló con la gente, le mostró cuidado y compasión y satisfizo las necesidades físicas antes de llamar a alguien para que lo siguiera, dijo él.
El plan que endosaron los delegados depende de la evangelización corporativa y personal. Entre 2012 y 2015, los líderes de la iglesia equiparán los pastores y laicos por igual para lanzar esfuerzos de alcance en más de 650 de las ciudades más grandes del mundo. Para reflejar mejor la «diversidad cultural y carácter particular» de las trece divisiones mundiales de la iglesia, los administradores regionales escogerán la ciudades a evangelizar y trabajar un método que enlazará mejor con sus respectivas comunidades.
El evangelista adventista Mark Finley comparó el documento de nueve páginas sobre evangelización urbana con la Declaración de Independencia de Estados Unidos. «Ese será visto como uno de los virajes más significativos dentro de la iglesia adventista del séptimo día contemporánea», dijo Finley. «Este documento es más que papel; puede ser una estrella polar del norte en modelar cuidado y compasión totales para las grandes ciudades».
Aunque los delegados demostraron apoyo colectivo por el plan, varios dieron sugerencias sobre cómo fortalecerlo. Muchos dijeron que debería reconocer el trabajo de los evangelistas adventistas y laicos que ya están atendiendo la Ciudad de Nueva York.
Leslie N. Pollard, presidente de Oakwood University, una escuela operada por la iglesia, dijo que tales personas deberían ser reconocidas en el documento. «Nos gustaría ver a estas personas afirmadas por permanecer adheridos con la ciudad, no abandonándola. No queremos invalidarlos porque ahora «los puede más» de Washington vienen», dijo Pollard.
G. Earl Knight, presidente de la Asociación Greater New York de la iglesia, se hizo eco del llamado de Pollard por la colaboración con aquellos en el terreno en la Ciudad de Nueva York. «Ellos sabe los desafíos. Algunos que entraron a ese campo de batalla se desanimaron y salieron. Algunos permanecieron y pelearon la batalla», dijo Knight. Al laborar juntos, y a través de la «percepción, visión y todos los recursos que podamos encontrar», la iglesia puede cumplir «esta tremenda tarea«, dijo Knight.
Otros delegados cuestionaron si un esfuerzo evangelizador de largo metraje en la Ciudad de Nueva York podría ser sostenido «mucho tiempo después de apagarse las luces, el orador se va y la carpa es desarmada». Uno sugirió un centro de estilo de vida, enfocando en el énfasis de la iglesia en vida saludable.
«Les prometo que el Ministerio de Salud está aquí para capacitar, coordinar con ustedes, venir y trabajar con ustedes en los «desagües» para hacer lo que podamos, porque el Ministerio de Salud es una un forma inicial que podemos aproximar la evangelización», dijo Allen Handysides, director de Ministerios de Salud de la iglesia a nivel mundial.
«Cada departamento de la Asociación General doblará el espinazo para proveerles en el campo con cualquier recurso que usted siente que necesita para lograr cualquier cosa que usted sienta que es más apropiada para su región», dijo Handysides.
Las instituciones educativas de la iglesia también pueden jugar un papel central hacienda que la evangelización urbana sea sostenible, dijo Pollard.
«Nuestras escuelas podrían server no solo como lugar de protección» dijo Pollard, «pero como centros de la misión». Las escuelas podrían también coordinar la investigación sobre qué métodos de evangelización urbana son más efectivos, convirtiendo a los evangelistas en «profesores de ministerio», dijo Pollard. De Nuevo, él solicitó ideas de aquellos que ya están ministrando en la ciudad. «Ellos tiene un fuerte sentido de lo que funciona y de lo que no funciona».
Trevor Baker, presidente de la Asociación Nororiental de la iglesia, reiteró la necesidad por una «presencia sostenida» en la Ciudad de Nueva York después del abrumador asalto evangelizador».
Ministrar la Ciudad de Nueva York ha sido una pasión de mucho tiempo de Wilson. La disertación doctoral del líder de la iglesia a nivel mundial en 1981 de New York University fue «Un Estudio de la Teoría de Elena G. White del Trabajo Religioso Urbano según se Relaciona con el Trabajo la Iglesia Adventista del Séptimo Día en la Ciudad de Nueva York».
Mientras el foco de la iglesia sobre evangelización urbana empieza en la Ciudad de Nueva York, Wilson les recordó a los delegados del alcance global del esfuerzo. Varias veces visitó ciudades en Europa este año y le expresó a los delegados que siente «un tremendo peso» por la región.
Traducción: Aleida T. Romero
