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El proyecto “¡Yo quiero ir a la escuela!» ofrece apoyo a centenares de niños en Rumanía

El proyecto de ADRA «¡Yo quiero ir a la escuela!» tiene como propósito apoyar a niños estudiosos y diligentes en la escuela, apreciados por las autoridades locales y que han obtenido buenos resultados académicos, aun cuando procedan de familias vulnerables y estén constantemente amenazados por el riesgo de tener que abandonar la escuela.

Hasta ahora, 436 niños procedentes de familias vulnerables han recibido apoyo.

«Estoy muy agradecida a Dios porque este año, al inicio del curso escolar, la agencia ADRA comenzó una nueva edición del proyecto ‘¡Yo quiero ir a la escuela!’», dijo Gabriela Istrate, directora del proyecto ADRA Rumanía. “Luchamos en favor de la educación porque sabemos que es la clave que puede cambiar la dirección en la vida de los niños procedentes de un trasfondo en desventaja y abrirles sus ojos a diferentes perspectivas en su vida”.

La directora Istrate concluyó diciendo: “A través del proyecto ‘¡Yo quiero ir a la escuela!’ luchamos en favor de sueños realizados, de esperanzas sembradas en el alma y del gozo que se refleja en los ojos de los niños, gracias a nuestros patrocinadores, voluntarios locales y colaboradores en general”.

ADRA Rumanía

Desde 1990, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales en Romanía (ADRA Romanía) ha estado particularmente involucrada en proyectos de desarrollo que benefician a la población entera. Al dirigir los proyectos lanzados de acuerdo con el lema «Justicia. Compasión. Amor», ADRA Rumanía se esfuerza por traer gozo y esperanza a la vida de los beneficiarios, al promover en su favor un mejor futuro, buenos valores y dignidad humana.

Como una acreditada agencia proveedora de servicios, ADRA Rumanía es parte de la Red Internacional ADRA , la organización humanitaria mundial de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, una de las organizaciones no gubernamentales de más amplia presencia en el mundo. ADRA International tiene participación activa en más de 118 países, guiada por una filosofía que combina el sentido de compasión con un espíritu de actuación práctica, atendiendo las necesidades de las personas sin hacer distinción de diferencias étnicas, políticas o religiosas, con el propósito de servir a la humanidad, de manera que todos puedan vivir juntos como era la intención de Dios.

El artículo original se publicó en el sitio electrónico en lengua rumana de ADRA Rumanía.

Traducción – Gloria A. Castrejón

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