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Informe del tesorero enfatiza la necesidad de trazar estrategias para incrementar el impacto misionero.

10 de abril de 2024| Silver Spring, Maryland, Estados Unidos | Marcos Paseggi, Adventist Review

El actual estado sólido de las finanzas de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día es resultado de las bendiciones de Dios y los esfuerzos conscientes de sus líderes de controlar los gastos a la vez que se incrementan los fondos para iniciativas misioneras en diversas partes del mundo, dijo Paul H. Douglas, tesorero de la Asociación General. Su declaración fue parte del Informe de Tesorería, en el primer día del Concilio de Primavera de la Junta Directiva de la Asociación General (GC EXCOM) en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos, el pasado 9 de abril.

“La posición financiera de la Asociación General al 31 de diciembre de 2023 es sólida”, dijo Douglas. “Alabamos al Señor por la sólida posición financiera, si consideramos las condiciones económicas globales que prevalecen en el mundo”.

Paul H. Douglas, tesorero de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día, presenta su parte del Informe de Tesorería, en el primer día del Concilio de Primavera en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos, el 9 de abril. [Fotografía: Enno Müller, Adventist Review]

Un cambio de rumbo muy positivo

Douglas explicó que una señal sumamente positiva es que la Asociación General terminó el año financiero con aproximadamente 310 millones de dólares en activos netos, del cual el 92 por ciento es efectivo e inversiones. “Eso no es obra nuestra: es obra de Dios y solo de Dios. Una vez más se nos ha recordado que en momentos que podemos considerar turbulentos, que en momentos que podemos considerar preocupantes, Dios está en control, y él suplirá todo lo que necesitamos para que hagamos lo que él nos ha llamado a hacer”.

Douglas explicó que en 2023, la Asociación General recibió aproximadamente 13 millones de dólares más que los 78 millones de dólares presupuestados. Las ofrendas también se han ido recuperando después de la pandemia del COVID-19, dijo Douglas. “Para el año 2023, hemos excedido el presupuesto y el año previo de 2022 en 23 y 10 millones de dólares, respectivamente”, dijo Douglas. Eso significa que en 2023, la Asociación General recibió 97 millones de dólares en ofrendas, en contraste con los 74 millones de dólares prespuestados.

El constante incremento en ofrendas significa que en 2023, solo el 48 por ciento de la financiación de la Asociación General provino de los diezmos, lo que revirtió la tendencia de años previos. “El relativo equilibrio de diezmos y ofrendas se debe en gran parte a la generosidad de nuestros miembros de apoyar nuestra misión global y no tan solo la misión local administrada por las iglesias a las que asisten”, explicó Douglas.

El subtesorero Ray Wahlen hace una presentación sobre el tope operativo de la Asociación General en 2023 y los sustanciales ahorros que implementó la administración, lo que ayudó a producir resultados positivos. [Fotografía: Enno Müller, Adventist Review]

Gastos, capital operativo e inversiones

Los gastos de los programas de la Asociación General en 2023 sumaron 172 millones de dólares. Mientras que el 43 por ciento de esa cifra se usó para estrategia y apoyo misionero, el 15 por ciento se gastó en el desarrollo del liderazgo y la rendición de cuentas, y el 13 por ciento en medios y publicaciones. Además, se gastó un 9 por ciento en las instituciones educativas, y otro 20 por ciento en otras actividades. Pero a pesar de las presiones inflacionarias, dijo Douglas, “la Asociación General logró mantener los mismos gastos respecto del año anterior, lo que es un testamento del control cuidadoso de los gastos”.

El capital operativo y los activos líquidos también arrojaron resultados positivos, informó Douglas. Según él, esas cifras se enfocan en cuán lista está una organización para responder a una emergencia, para que sus actividades misioneras no se vean interrumpidas. Douglas explicó que el reglamento vigente recomienda “un mínimo de seis meses de capital operativo y un mínimo de tres meses que debería figurar en activos líquidos”. Pero para la Asociación General, expresó, “hemos decidido por voto de este cuerpo que los mínimos deben fijarse en doce y nueve meses, respectivamente”. Douglas se sintió feliz de reportar que para el fin de 2023, la Asociación General tenía 13,9 meses de capital operativo disponible y 11,1 meses en activos líquidos.

En relación con las inversiones, Douglas enfatizó que “le gustaría alabar al Señor por el cambio de rumbo significativo de las inversiones”. Después de una reducción en el valor del mercado de 18 millones de dólares en 2022 debido a la volatilidad de los mercados financieros, una recuperación en 2023 ha incrementado de manera significativa su valor de mercado. “Sí, los mercados financieros son volátiles, pero me gustaría asegurar a este cuerpo […] que nuestra filosofía de inversión es consistente con una mayordomía apropiada de los recursos que Dios nos ha encomendado”, dijo Douglas.

Los miembros de la Junta Directiva de la Asociación General escuchan el Informe de Tesorería en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos, el 9 de abril. [Fotografía: Enno Müller, Adventist Review]

Ahorros sustanciales

En el siguiente segmento del Informe de Tesorería, el subtesorero de la Asociación General Ray Wahlen reportó sobre el tope operativo para 2023, o la cantidad de dinero que la Asociación General puede gastar anualmente según el reglamento. Wahlen se sintió feliz de informar que en 2023, la Asociación General operó en tan solo el 76,78 por ciento del momento establecido por la Junta Directiva.

Según Wahlen y a diferencia de ocasiones previas, donde los puntos bajos de gastos fueron resultado de la crisis financiera, en 2023, la principal razón del bajo porcentaje gastado se debió “al monto total de diezmos que se recuperaron de las bajas económicas globales a un ritmo más rápido que los gastos planificados para las operaciones financieras”.

Este informe, enfatizó Wahlen, es “un testimonio del poder de Dios y la fidelidad de sus muchos mayordomos cristianos en el mundo”.

Douglas concordó con él. “En 2023, podemos decir que Dios ha seguido bendiciendo a su iglesia por medio de la fidelidad de nuestros miembros, para que podamos dedicarnos a la comisión de alcanzar el mundo para Cristo”.

Dos Fondos de Impacto Misionero 

As an example of how the current solid financial state of the General Conference directly intersects with mission, Douglas referenced two specific funds connected to mission projects at various levels of the church.

“Si realmente creemos que Jesús viene pronto, tenemos que pensar y actuar de manera diferente. Y tenemos que preguntarnos y responder las preguntas adecuadas”, dijo Paul H. Douglas, el tesorero de la Asociación General, durante el Informe de Tesorería del pasado 9 de abril. [Fotografía: Enno Müller, Adventist Review]

El primer Fondo de Impacto Misionero, que fue implementado en 2021, compromete recursos para apoyar los proyectos misioneros generados por las iglesias locales, recordó a los miembros de la GC EXCOM. Al brindar apoyo a las iglesias locales cuyos envíos de solicitudes de proyectos sean aprobados, los líderes de la Asociación General buscan enfatizar su intención de inspirar a las iglesias locales, invertir en la misión de vanguardia de las iglesias locales, e impactar el mundo para Cristo, una comunidad a la vez, enfatizó Douglas. Reportó que en 2025, habrá 5 millones de dólares disponibles para destinar a ese fondo.

De manera simultánea, y por primera vez, un segundo Fondo de Impacto Misionero destinará recursos financieros para apoyar a las divisiones del mundo y territorios adjuntos de la Iglesia Adventista que implementen una iniciativa de evangelismo en todo el territorio en 2024, 2025, 2026 o 2027. En el caso de este segundo fondo, el énfasis estará en las regiones que presenten un plan abarcador que incluya a las uniones, las asociaciones locales y las iglesias locales, explicó Douglas.

Añadió que la inversión por entidad eclesiástica destaca la intención de la Asociación General de inspirar a los líderes y miembros de iglesia en una iniciativa de evangelización en todo el territorio, invertir en recursos financieros y tecnológicos, e “impactar el reino de Dios con una elevada cosecha de almas que, a su vez, lleguen a ser discípulos activos de Jesucristo”. Y añadió: “Estamos comprometidos desde la Asociación General a apoyar a cada división y cada entidad adjunta [para cubrir] hasta el veinte por ciento del costo total del programa, por hasta 500 mil dólares por entidad”.

Ya está sucediendo

Entre las principales iniciativas regionales ya planificadas se encuentra el Impacto de Evangelismo en la División de África Centro-Oriental (EEI) 2025, que apoyará los planes de evangelización en once países del centro y norte de África, que comprenden esa región eclesiástica, reportó Douglas. “Cuentan con un osado plan, un plan con el poder del Espíritu Santo de duplicar el número de miembros en esa división”.

El plan incluye involucrar 33 mil sitios diferentes para proclamar allí el evangelio, contó Douglas.

También en la División Norteamericana, Pentecostés 2025 está buscando planificar, programar e implementar “Tres mil iniciativas de proclamación” para 2025, reportó Douglas. “Esto no es tan solo el evangelismo de hacerse de amigos y llevar a cabo diversas actividades de salud, sino de realmente proclamar la Palabra de Dios”, expresó. “La división está involucrada, sus uniones están involucradas, sus asociaciones están involucradas, sus miembros están involucrados, [y] llega la Asociación General a involucrarse y movilizar recursos para la misión”.

Un cambio de paradigma 

En general, los líderes del equipo de tesorería de la Asociación General explicaron que las últimas medidas son parte de un cambio de paradigma que busca fortalecer los esfuerzos coordinados para reenfocarse en la misión. “Tenemos que pensar y actuar de manera diferente”, dijo Douglas. “Necesitamos actuar de manera más deliberada con la estrategia”. Y añadió: “Si realmente creemos que Jesús viene pronto, tenemos que pensar y actuar de manera diferente. Y tenemos que preguntar y responder las preguntas adecuadas”.

Douglas enfatizó que en el pasado, había tan solo porciones de un pastel de asignaciones, un enfoque en compartimentos estancos en los programas de la iglesia, de gastos sin rendición de cuentas. “La idea ahora es actuar de manera más deliberada con nuestra estrategia, integrando nuestros esfuerzos e invirtiendo en pro del impacto misionero”, dijo Douglas. “En los próximos días y de allí en adelante, implementaremos un modelo que nos guiará sobre cómo invertir para tener un impacto”.

El objetivo, dijo Douglas, es evitar actividades que demanden una elevada inversión y tengan bajo impacto, y una baja inversión con bajo impacto. “Necesitamos arreglar y olvidarnos de ese tipo de actividades”, dijo. “¿Por qué estamos aquí? ¿Qué estamos haciendo con los recursos que Dios nos ha dado?”, preguntó.

Por último, enfatizó Douglas, la iglesia necesita pasar a actividades de alto impacto, aun hallando actividades que demandan una baja inversión pero poseen un impacto elevado, pasando de áreas que son “sin sentido y flojas” a otras que sean “inteligentes y estratégicas”.

Reacciones positivas de los delegados 

Varios delegados de la EXCOM se acercaron a los micrófonos sobre tablas para expresar su voz de apoyo a la iniciativa.

“Nos sentimos felices por el impacto del segundo [Fondo de Impacto Misionero], que se ocupa de las actividades de evangelismo en todo el territorio”, dijo Robert Osei-Bonsu, presidente de la División de África Centro-Occidental. “Creemos que esto es algo digno de felicitar, y que nos ha motivado a dedicarnos al evangelismo”.

David Kayombo Ndonji, de la Unión Asociación del Norte de Zambia en la División de África Meridional y Océano Índico, concordó con él. “Quiero confirmar el impacto [que el incremento de fondos] está teniendo en nuestro territorio […]. Solo quiero animar [a todos] a que tengan el mismo espíritu”, dijo Ndoji mediante la plataforma de videoconferencias Zoom. “Cuando hablamos de finanzas, deberíamos hablar sobre la misión, [y sobre] por qué estamos haciendo lo que estamos haciendo”.

Ella Simmons, una de las vicepresidentas de la Asociación General ya jubilada, también habló por Zoom para ofrecer palabras de afirmación. “Como jubilada, ahora puedo procesas esos ítems desde la perspectiva de un miembro de iglesia local”, dijo Simmons. Añadió que, al mismo tiempo, recordaba múltiples reuniones de planificación estratégica en las que los miembros de la comisión solían analizar la necesidad de un alineamiento entre misión y recursos. Ahora, todo eso se está haciendo realidad, expresó. “Dios está obrando en su iglesia, y nos sentimos tan agradecidos por lo que tesorería ha presentado hoy”, expresó.

Traducción de Marcos Paseggi

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