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La iniciativa está ayudando a las personas a desarrollar una cultura de ayuda mutua y responsabilidad compartida.

12 de julio de 2024 | Edward Rodriguez, División Asia-Pacífico Sur

Una innovadora iniciativa conocida como Proyecto Caprino ha surgido como mecanismo de apoyo vital en favor de familias vulnerables en Vietnam, particularmente después de ocurrida la pandemia de COVID-19.

Stephen Jungtae Kim, un pastor adventista coreano, que radica en Ho Chi Minh City, Vietnam, elaboró el Proyecto Caprino y lo lanzó en junio de 2021. Esta iniciativa fue una respuesta directa a los severos desafíos impuestos por el confinamiento por causa de la pandemia, lo cual restringió severamente el movimiento y la actividad económica que dio como resultado considerables dificultades para muchas familias, incluyendo aquellas dentro de la comunidad adventista, dijo.

Stephen Jungtae Kim da a conocer a la comunidad los frutos del Proyecto Caprino, habilitando con ello a las familias para obteenr su sustento y suplir con ello las necesidades de sus seres queridos. [Imagen cortesía de Stephen Jungtae Kim]

Su modelo de programa es claro y directo: Cada familia participante recibe dos cabras. La primera cría de esas dos cabras se dedica a la iglesia y se pasa entonces a otra familia vulnerable, extendiendo con ello el apoyo a la comunidad. Este sistema no solamente ayuda a las familias en sus necesidades inmediatas, sino también desarrolla una cultura de ayuda mutua y responsabilidad compartida.

Inicialmente, el proyecto tenía como objetivo proveer 200 cabras para 100 familias. Sin embargo, la iniciativa sobrepasó rápidamente las expectativas, con doscientas familias recibiendo un total de 400 cabras. Este inesperado crecimiento ha provisto un alivio económico vital y ha reforzado la misión del proyecto.

Una de las beneficiarias del proyecto es una madre que contrajo matrimonio a los 17 años y que tiene actualmente tres hijos. El alcoholismo y violencia de su esposo la forzó eventualmente a buscar el divorcio. Al haberse quedado sola para criar a sus hijos experimentaba un intenso resentimiento y cuestionaba su fe en Dios, quien había sido su eje fundamental toda su vida, desde su niñez.

En medio de sus luchas, fue seleccionada para participar en el Proyecto Caprino. En el transcurso de un año, sus dos cabras iniciales se volvieron cinco, proveyendo con ello apoyo vital y estabilidad.

La evolución de estos eventos la ayudó a redescubrir su fe, reconociendo que Dios la estaba guiando a través de su dificultades. Actualmente presta diligentemente sus servicios como maestra de niños en su iglesia y ha encontrado una nueva realización y propósito en su restaurada fe.

“El Proyecto Caprino se ha constituido en un pilar importante para muchas familias, al ofrecerles no solamente alimento e ingresos, sino también un sentido renovado de esperanza, fe y dignidad”, dijo el pastor Kim.

Al ir creciendo el Proyecto Caprino, continúa tocando más vidas y extendiendo su influencia, demostrando con ello el profundo impacto de la fe en acción. Es un testimonio de la resiliencia del espíritu humano y del poder del apoyo comunitario en tiempos de crisis.

La versión original de esta noticia se publicó en el sitio de noticiasde la División Asia Pacífico Sur .

Traducción – Gloria A. Castrejón

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