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24 de agosto de 2014 | Silver Spring, Maryland, Estados Unidos | Andrew McChesney/Adventist Review

El personal docente del Seminario Teológico Adventista de la Universidad de Andrews ha votado una declaración sobre los conceptos bíblicos de primacía, dijo la institución el viernes pasado.

El Seminario Teológico Adventista está ubicado en la Universidad Andrews, en Berrien Springs, Michigan, Estados Unidos. Fotografía de archive de ANN.

Los docentes de la principal institución norteamericana de preparación de los pastores adventistas adoptaron un estudio de siete páginas titulado: «Sobre la primacía singular de Cristo en la Iglesia».

El documento, que fue aprobado el jueves, «representa un consenso de parte del personal del seminario, que lo creó como un servicio para la iglesia mundial», expresó la universidad en una declaración.

«Me entusiasma ofrecer este estudio bíblico teológico a la iglesia, un estudio que ensalza la primacía singular de Cristo en la iglesia», expresó Jiří Moskala, decano del seminario. «Es mi esperanza que el estudio contribuya significativamente a los debates actuales sobre el liderazgo».

El documento se inicia al declarar inequívocamente que la cabeza o el líder de la iglesia no es otro que Cristo.

«Aunque en la iglesia existe un liderazgo legítimo, ningún otro ser humano puede aducir legítimamente un papel de primacía en la iglesia», expresa. «Como cabeza de la iglesia, Cristo brinda la manifestación última del amor de Dios, demostrando y vindicando el gobierno moral divino de amor, y derrotando de esa forma el gobierno falsificado del usurpador «príncipe de este mundo».

Más adelante, la declaración se refiere a las comprensiones bíblicas respecto de las funciones de los hombres y las mujeres.

«Dado que Cristo es el Esposo único de la iglesia (la esposa metafórica de Cristo), los miembros de la iglesia no pueden ser los esposos de la iglesia, sino que en forma colectiva, tanto los hombres como las mujeres, son la esposa de Cristo», dice.

La declaración no hace mención de la ordenación de las mujeres, una cuestión que divide a algunos miembros de la iglesia y que enfrenta un posible voto por parte de la Iglesia Adventista mundial en el Congreso de la Asociación General a llevarse a cabo en San Antonio, Texas, Estados Unidos, en julio de 2015.

La declaración sí afirma que Dios creó iguales al hombre y a la mujer en el Jardín del Edén, y dice que Dios desea restaurar esa igualdad.

«Aunque diversas interpretaciones de Génesis 3:16 han reconocido que después de la caída se produjo algún tipo de interrupción de ese ideal igualitario, la Biblia nos llama vez tras vez a regresar al plan original de Dios de una igualdad plena ausente de jerarquías (Cantares 7:10; Isaías 65:17, 25; cf. Gén 1:29-30)”, expresa la declaración.

«Si bien a menudo son entendidos erróneamente (2 Pedro 3:16), los escritos de Pablo conservan este modelo del Edén (Efesios 5:21-23), afirmando con el resto de las Escrituras el ideal del evangelio de la restauración última del modelo del Edén (cf. Mateo 19:8; 2 Corintios 5:17; Gálatas 3:28).

«Elena White también subraya este paradigma redentor: ‘La mujer debe ocupar el puesto que Dios le designó originalmente como igual a su esposo’ (HC 206)», expresa.

Moskala dijo que espera que la declaración de Andrews ayude a poner fin a algunas divisiones entre los miembros de iglesia.

«Es mi oración que este documento demuestre ser una influencia unificadora en la iglesia», expresó.

Traducción de Marcos Paseggi

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