Varias escuelas en Brasil incorporan perros como apoyo emocional a estudiantes

Esta iniciativa procura apoyar la salud mental y el bienestar general de los estudiantes.

10 de marzo de 2025 | Brasil | Jackson França, División Sudamericana yAdventist Review

Al comienzo del año escolar 2025, varias escuelas adventistas del séptimo día en la región sur de Brasil, introdujeron una novedad que conquistó el ánimo de los estudiantes: cachorritos de raza golden retriever (cobrador dorado). Conocida por su temperamento dócil y sociable, se eligió esta raza canina porque puede interactuar bien con niños y adolescentes, dijeron los líderes de esta iniciativa.

“Además de proporcionar gozo, los perros juegan un papel importante en el bienestar emocional de los estudiantes al promover valores tales como empatía, respeto y cooperación”, explicaron.

La introducción de perros en el ambiente escolar se basó en la convicción de que los animales contribuyen significativamente al desarrollo emocional y social de los niños y adolescentes, informaron los dirigentes. Inspirados por otras escuelas adventistas que implementaron proyectos similares, los dirigentes de las escuelas en el oeste de Paraná adoptaron la iniciativa, dirigida inicialmente al apoyo de estudiantes con crisis de ansiedad. Sin embargo, en pocos días se hizo evidente que los perros podían beneficiar a toda la comunidad escolar.

La interacción con los cachorritos cambió la rutina en los corredores de la escuela. Situaciones que antes generaban ansiedad, tales como los momentos antes de los exámenes, o desacuerdos entre los estudiantes, dio lugar a interacciones más positivas marcadas por el afecto y la conexión. Con su quieta presencia, los perros comenzaron a convertirse en un punto de apoyo emocional para los estudiantes durante todo el día.

Elección de raza canina y comentarios

La elección de la raza golden retriever no se hizo por casualidad. Conocidos por su ternura, inteligencia y habilidades de socialización, estos perros reciben entrenamiento profesional tres veces a la semana. Durante los fines de semana, el equipo escolar se turna para atenderlos, lo cual asegura un desarrollo saludable y equilibrado, informaron los dirigentes escolares.

También los padres apoyan la iniciativa. Muchos de ellos informan que la presencia de los perros en la escuela ayuda a sus hijos a afrontar mejor la ansiedad y el estrés escolar, especialmente en aquellos estudiantes que siempre quisieron tener una mascota, pero que no podrían tener una en casa. “Mi hijo siempre llega de la escuela contando acerca de los juegos que jugó con Mel [el cachorrito golden retriever ]. ¡Nunca había estado tan emocionado al ir a la escuela!”, dijo la madre de uno de los estudiantes.

Estos perros incluyen a Cacau (Cocoa), en la Academia Adventista Cascavel. Más que apoyo emocional, Cacau ha reforzado valores tales como respeto por la naturaleza y responsabilidad colectiva, informaron los líderes escolares. “La filosofía de la educación adventista alienta la conexión con el ambiente y principios espirituales; y la presencia de la mascota ha complementado este aprendizaje”, dijeron.

Oto impacto positivo se pudo observar en la organización de la escuela. Los estudiantes comenzaron a prestar atención a la higiene de los espacios compartidos. “Convivir con Cacau ha estimulado la atención y dedicación de los estudiantes”, dijo el director de la academia, Felipe Cardoso.

Otro de los perros es Mel (Miel), presente en la Academia Adventista Campo Mourão. Para su directora, Aline Gonçalves, “convivir con Mel ha despertado en los estudiantes un mayor sentido de responsabilidad y empatía”. Y añade: “Su impacto es mucho mayor de lo que habíamos imaginado. Comenzamos con la intención de proveer apoyo emocional; pero hemos visto que su presencia fortalece varios aspectos del aprendizaje y la socialización”.

Y está también Amora (Mora), presente en la Academia Adventista Toledo. La terapia asistida por perros ha probado ser un buen e innovador enfoque, dijeron los dirigentes escolares. La presencia de Amora ha ayudado a los estudiantes a enfrentar dificultades emocionales, creando un ambiente más seguro y acogedor, explicaron. “Nuestra experiencia con Amora ha sido transformadora, reforzando el compromiso de la escuela con el bienestar integral de los estudiantes”, dijo la directora Telma Alexandre.

Un futuro promisorio

Los resultados hasta el momento son muy prometedores, informaron los dirigentes escolares. Tienen planes ahora de expandir este proyecto, creando actividades específicas que integren a los perros en una forma más estructurada dentro de la rutina escolar. El objetivo es hacer extensiva esta iniciativa a otras escuelas, dijeron. Actualmente, el sistema de educación adventista en la región occidental de Paraná incluye siete escuelas con aproximadamente 4,379 estudiantes.

La versión original de esta historia la publicó la División Sudamericana en su sitio de noticias.

Traducción – Gloria A. Castrejón