La clase está en sesión
15 de octubre de 2012, Silver Spring, Maryland, Estados Unidos…Edwin Manuel García/ANN
El auditorio de las oficinas mundiales de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, se convirtió el lunes en aula universitaria, cuando cientos de administradores visitantes de todo el mundo, estudiaron y revisaron secciones de un voluminoso libro llamado Reglamento Operativo.
Dando un giro a la forma típica de una reunión de negocios durante el Concilio Anual, los oficiales de la oficina ejecutiva de Secretaría echaron mano de dramatizaciones y pequeñas pruebas para mantener el interés en lo que muchos pastores, víctmas de desfase por diferencia de horarios, considerarían probablemente un tema que induciría al sueño: El contenido de un libro de 900 páginas que resume los reglamentos y procedimientos de la iglesia.
El secretario de la iglesia adventista mundial, G. T. Ng, dio manzanas a los delegados al Concilio Anual que contestaron correctamente las preguntas de la prueba. En varias pruebas se demostró el conocimiento de los delegados acerca del Reglamento Operativo. «¿Cuántas veces lo has leído de tapa a tapa?» les preguntó. La audiencia rió efusivamente, si no un tanto avergonzada. Fotografías por Ansel Oliver.
Los dirigentes máximos de la iglesia decidieron este año familiarizar más a los administradores con el Reglamento Operativo, al darse cuenta de que muchos de ellos no leen muy frecuentemente ese libro encuadernado en color negro que contenía solamente 63 páginas cuando apareció por vez primera en 1926.
«¿Cuántas veces han leído el Reglamento Operativo de tapa a tapa?», preguntó G. T. Ng, el ingenioso secretario de la Asociación General. La respuesta –fuertes risas– no sorprendió a G.T. Ng, quien regaló manzanas rojas a los administradores que respondieron acertadamente a sus muchas preguntas a través del curso de dos horas de duración.
La clase comenzó cuando G.T. Ng llamó la atención del público al hacer sonar la campana colocada en el podio. «Hola, buenos días, clase matutina. Bienvenidos a la Universidad de la Asociación General; esta es la calse GCWP101», anunció, mientras los ujieres distribuían un sílabo.
Su presentación dividió el Reglamento Operativo en cinco secciones, cada una dirigida por un alto dirigente de la Asociación General, con alguno de los siguientes énfasis:
• Organización y Administración: Lowell Cooper, un vicepresidente, que explicó la diferencia entre el Manual de la Iglesia y el Reglamento Operativo. El Reglamento Operativo, dijo, es una colección de decisiones de liderazgo global que declara la forma en que las entidades dentro de la estructura de la iglesia deben vivir y trabajar juntas. El Manual de Iglesia, dijo, guía a las iglesias en la forma en que deben operar en relación a su asociación o misión local. Ninguno de estos libros está por encima del otro, añadió; debe usarse uno al lado del otro.
• Departmentos y Agencias: David Trim, director of Archivos, Estadísticas e Investigaciones, quien declaró que había 13 series de reglamentos, una por cada departamento de la iglesia mundial.
• Ministerio y Entrenamiento: Secretario Ministerial Asociado Jonas Arrais, quien enfatizó la responsabilidad de asociaciones, misiones y campos locales, de supervisar a los pastores aspirantes y ofrecer entrenamiento apropiado, incluyendo tres meses o 350 horas de experiencia como colportores.
En una dramatización, el vicesecretario Myron representa el papel de un hombre al comienzo de una fila en una librería, que ha conseguido la copia final del nuevo Reglamento Operativo 2012, de parte del gerente de la librería, para desmayo de aquellos en la fila que esperaban poder adquirir una copia el día que salió a la venta. .
• Reglamentos de Empleados de Interdivisión: Rosa Banks, una secretaria asociada, esbozó un reglamento que señala que se requiere que los misioneros asistan al Instituto de Misiones para aprender cómo vivir en el campo misionero, lo cual es especialmente útil al prestar servicios en una cultura diferente a la propia.
• La tesorera asociada, Daisy Orion, habló sobre Reglamentos Financieros, que incluyeron recordativos tales como el requerimiento de que se lleven a cabo auditorías financieras y reglamentos centrales de las pruebas de cumplimiento o conformidad.
Al final de la clase, los ujieres distribuyeron una hoja de calificaciones con las palabras «¡Felicitaciones! Has pasado la clase Introducción al Reglamento Operativo 101» Esta tarjeta incluía la calificación obtenida, escrita de antemano: A+.
El «catedrático» entonces invitó a los estudiantes a asistir a la clase del año entrante: GCWP201.
El organista del auditorio concluyó esta cátedra con las notas de la melodía mejor asociada con graduaciones: «Pompa y Circunstancia».
Traducido por Gloria A Castrejón