Beca estudiantil del presidente está ayudando a estudiantes a lidiar con los efectos financieros de la pandemia.

1 de marzo de 2021 | Berrien Springs, Míchigan, Estados Unidos | Por Isabella Koh, del Lake Union Herald

“Era un viernes de tarde y estaba saliendo del trabajo”, dijo Melissa Blemur, una estudiante del primer año de pre enfermería, al recordar el momento en que recibió la noticia acerca de su situación financiera en la Universidad Andrew, una institución adventista en Berrien Springs, Míchigan, Estados Unidos.

Su consejero académico le había llamado con la promesa de buenas noticias para hacerle saber que era beneficiaria del Fondo de Becas Estudiantiles del Presidente.

Cuenta Melissa: “Gracias a Dios que me encontraba en mi automóvil, porque comencé a gritar en el teléfono. Estaba tan feliz y al mismo tiempo, conmocionada, porque, de entre todos los chicos que vienen a Andrews, yo fui aceptada. Me sentí realmente bendecida al escuchar estas nuevas”.

José Antonio Alegría II [Imagen: Andrews University]

Melissa cree que Dios la trajo a la Universidad Andrews. Recuerda que al final de su último año de escuela secundaria, se tomó el tiempo para orar acerca de sus siguientes pasos. La Universidad Andrews fue lo que inmediatamente vino a su mente, pero Melissa oró nuevamente para estar segura. El sábado siguiente, descubrió que el pastor visitante en su iglesia era un exalumno de esa universidad. Dice Melissa: “Tomé eso como una señal de Dios, y aquí estoy ahora”.

El año pasado, centenares de estudiantes se beneficiaron a través de dos ayudas financieras clave ofrecidas por la Universidad Andrews: El Fondo de Emergencia por COVID-19 de Vida Estudiantil y el Fondo de Becas Estudiantiles del Presidente. Juntas, las dos formas de ayuda proveen ayuda inmediata por razón de la crisis y hacen frente a las dificultades financieras a largo plazo por causa de la pandemia.

El Fondo de Emergencia por COVID-19 de Vida Estudiantil fue creado como respuesta directa al impacto financiero que la pandemia ha tenido sobre los estudiantes de la Universidad Andrews, desde marzo de 2020. Algunos estudiantes, incapaces de regresar a sus lugares de origen, perdieron también sus trabajos en el plantel o en la comunidad. El fondo ayuda a cubrir los gastos de renta y comestibles, proveyendo un muy necesitado apoyo en tiempos necesarios.

Originado en 1972, el Fondo de Becas Estudiantiles del Presidente ayuda a estudiantes que, habiendo utilizado todos los demás recursos de ayuda financiera, incluyendo préstamos estudiantiles, ayuda gubernamental, contribuciones de los padres, becas de mérito y empleo, todavía necesitan un empujón final para terminar su matrícula. Otorgada una vez por semestre, en la forma de una suma específica, desde US$ 500 hasta US$ 2,000, esta beca les permite a los estudiantes completar el proceso financiero e inscribirse en la Universidad Andrews.

Melissa Blemur [Imagen: Andrews University]

La comunicación acerca de ambos fondos se envió esa primavera a través de correos electrónicos, llamadas telefónicas y medios sociales a los ex alumnos y otras personas dispuestas. En respuesta, desde abril de 2020, 532 donadores han contribuido con donaciones que suman casi un millón de dólares. Gracias a esta generosidad, 460 estudiantes recibieron asistencia financiera esencial por parte de uno de los dos fondos mencionados.

Otro estudiante beneficiario del Fondo de Becas Estudiantiles del Presidente, José Antonio Alegría II, se unió a la comunidad de la Universidad Andrews el otoño de 2020, como estudiante de primer año de pre enfermería. José siente una gran pasión por esa carrera escogida, por el servicio a la comunidad y por los carros; y recuerda que “deseaba venir aquí [a Andrews] desde que era joven”. Al hacer sus investigaciones, le fue muy claro que la Universidad Andrews era el lugar que habría de fomentar la carrera que él deseaba proseguir.

Él recibió las buenas noticias de la beca a las 2:30 a.m., la mañana de su viaje desde la región de Chicago a Berrien Springs y recuerda cómo tuvo que esperar hasta que el resto de su familia despertó, para darles a conocer la buena noticia. Dice José: “Me sentía un tanto temeroso y a la vez emocionado por esta nueva experiencia universitaria. La beca me reafirmó y me motivó para empeñarme más en trabajar duramente.

Hasta ahora, una de las cosas favoritas para él en el plantel, ha sido la experiencia de conocer nuevas personas. Dijo: “Me encanta el plantel ¡y la gente aquí es buenísima! Me encanta la diversidad”. José se siente emocionado respecto al futuro y agradecido por la parte que su beca ha pagado ayudándolo a proseguir en su jornada académica y carrera futura.

Zuzai Hizoke [Imagen: Andrews University]

El estudiante de posgrado, Zuzai Hizoke, viajó con su familia a la Universidad Andrews, desde  Papúa Nueva Guinea (PNG) en 2017, con la idea de que esta institución ha sido bendecida con dos cosas especialmente geniales: los mejores profesores y la mejor biblioteca. Después de cumplir con los prerrequisitos, es ahora un estudiante de primer año en busca de un doctorado en misiones, con estudios vinculados sobre educación religiosa y discipulado. Y, ciertamente, ha experimentado personalmente la dificultad financiera de ser un estudiante internacional procedente de un país de muy baja economía. “La beca vino en un momento cuando realmente necesitaba un milagro. . . Fue un alivio, especialmente en el contexto de la pandemia de COVID-19 y sus serios efectos. Puedo decir que esta beca tan oportuna me ha ayudado a enfocar mejor la atención en mis estudios y no preocuparme tanto por las cuotas. Es de esta manera que tal ayuda oportuna ha sido tan poderosa”, afirmó.

Zuzai Hizoke participa como miembro activo de la comunidad del plantel, a través de la predicación, las escuelas sabáticas y estudios bíblicos; y su plan es enseñar y ejercer su ministerio cuando regrese a su hogar en PNG después de haber terminado sus estudios. Él y su familia tienen un lema para cuando dejen la Universidad Andrews: “A dondequiera que el Señor llame”; y permanecen abiertos respecto a la guía divina en futuras jornadas.

Mientras tanto, Zuzai Hizoke expresa su gratitud a la Universidad Andrews. “Recuerden, tal vez sea para ustedes una de esas cosas normales que hacen, el otorgar becas como la presente a tantos que pasan por estos caminos; pero, por favor, recuerden que para algunos de nosotros, es algo muy grande, algo que celebra la familia y nuestra gente allá en nuestro lugar de origen. Esto habla muy favorablemente de este país y sus ciudadanos; pero, más importante, de la universidad”. Y añadió: “Permítanme decir: Gracias a las mentes maestras detrás de esta beca; oro porque nuestro buen Señor continúe guiando, dirigiendo y bendiciendo a todos ustedes”.

La  versión original  de esta noticia se publicó en el Lake Union Herald.

Traducción – Gloria A. Castrejón

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