13 de enero de 2021 | Florida, Estados Unidos | Por AdventHealth
Sabemos que el portar una mascarilla facial es importante para ayudar a disminuir la propagación del COVID-19. Actualmente, nuevos hallazgos de los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC), en los Estados Unidos, muestran que el uso de la máscara ayuda a protegerte a ti, como portador, además de proteger a las personas en torno tuyo.
Los CDC explican en sus nuevas pautas, que las mascarillas de tela apropiada pueden bloquear las partículas de virus que podrías exhalar, además de bloquear las partículas respiratorias infecciosas de los demás, previniendo así que llegues a inhalarlas.
Protegiéndote a ti mientras tú proteges a otros
Los CDC tomaron en cuenta muchos estudios al elaborar estas nuevas pautas, incluyendo un estudio que le dio seguimiento a personas infectadas de coronavirus que estuvieron dentro de un aeroplano por más de 10 horas sin infectar a nadie más, usando máscaras faciales de protección.
Es importante notar que todavía se recomienda que tu mascara facial tenga varias capas de tela, a fin de prevenir eficazmente que los gérmenes entran o salgan.
Cómo ayudan los cubrebocas o mascarillas faciales
Los CDC aconsejan portar una mascarilla facial protectora que te cubra la nariz y la boca cuando tengas forzosamente que estar en un lugar público en el que sea todo un desafío guardar la distancia social, como en el caso de acudir al supermercado o a la farmacia. El hacerlo puede ayudar a prevenir la propagación del virus. Algunas comunidades recomiendan también el uso de la máscara al aire libre, dependiendo del grado de infección en esa zona.
Sabemos que una cantidad significativa de personas con coronavirus no presenta síntomas, lo que se entiende como ser asintomático. Aun aquellas personas que son presintomáticas; en otras palabras, que eventualmente van a presentar síntomas, pueden transmitir el virus a otros. Siendo que podrías propagar el virus aun cuando no tengas ningún síntoma, los CDC recomiendan el uso de las máscaras protectoras faciales.
Cómo entender la propagación asintomática
De acuerdo con los CDC, la persona puede estar enferma del virus desde uno a catorce días antes de que se presenten síntomas tales como fiebre, fatiga, o tos seca. El virus se disemina primordialmente a través de las microgotas respiratorias exhaladas al toser, estornudar, hablar o hasta respirar. Aunque muchas personas piensan que tales partículas son grandes, de hecho pueden ser muy, muy pequeñas, tan pequeñas que no se pueden ver en el aire.
La Organización Mundial de la Salud enfatiza el hecho de que muchas personas con COVID-19 experimentan síntomas muy leves, pero especialmente muy temprano en la enfermedad es cuando es más contagiosa. Así que es posible contagiarse del virus por causa de una persona que tiene simplemente un poco de tos y no se siente enferma, o de alguien que no se siente bien, pero que no está tosiendo.
Los CDC dicen que las personas asintomáticas o presintomáticas que se sienten bien son de hecho responsables por más del 50 por ciento de las transmisiones de coronavirus.
Higiene de las mascarillas faciales
Recuerda llevar una mascarilla de protección cada vez que salgas de tu casa. Antes de ponerte o quitarte tu mascara de tela, lávate bien las manos para evitar que cualquier germen de tus manos se desplace a tu sistema respiratorio.
A fin de ayudar a aumentar la efectividad de tu cobertura facial, sigue también las siguientes sugerencias:
La original version (versión original) de esta noticia se publicó en el blog site (blog) de AdventHealth.
Traducción – Gloria A. Castrejón